Se puede realizar mediante encuentros presenciales, telefónicos y/o virtuales (Skype, Sala de video conferencias, etc.). Las sesiones son de 1 hora, 1 vez por semana. El coaching es mucho más que una herramienta de gestión, es un modo de ser y de vivir el día a día, lo que lo convierte en una excelente posibilidad en la gestión de empresas y una herramienta de valor incalculable en el desarrollo personal para obtener metas inimaginables tanto en el ámbito personal como profesional. El coaching no reemplaza en ninguna forma a la terapia, desde el coaching ontológico trabajamos con personas que están bien y quieren estar mejor, asistimos a las personas a que diseñen su futuro. El coach es un acompañante que asiste, observa, cuestiona, confronta, pero no da respuestas ni soluciones ni señala caminos. Por medio de preguntas permite que las personas encuentren en sí mismas las respuestas y las herramientas para manejar los problemas y alcanzar sus objetivos. Es un proceso que tiene un principio y un final muy definidos y que suele durar entre tres y seis meses en común acuerdo. A partir de ahí se trabaja en reuniones semanales, ya sea personalmente o incluso por teléfono (muy útil para altos ejecutivos con agendas complicadas o viajes continuos), en las que el coach ayuda a entender en dónde están los obstáculos, qué se está haciendo bien o mal en el propósito de lograr los objetivos del cliente.